Por segundo año consecutivo, nuestro equipo formado por los pilotos Anulfo González y Angel Aguirre han conseguido un meritorio tercer puesto en la Copa Aeronáutica Gordon Bennett que se inició desde la localidad suiza de Gruyéres en el cantón de Friburgo.
Desde los días precedentes al despegue se empezó a perfilar la trayectoria que marcaban los vientos en dirección nordeste, hacia el norte de Polonia. La alternativa sería volar directamente hacia el norte, sobre el Mar Báltico, donde se pronosticaba muy mal tiempo por lo que descartamos esta posibilidad. La oportunidad de alargar el vuelo mas allá de Polonia pasaba por el corredor entre Kaliningrado y Bielorrusia, que en esta ocasión se estrechaba aún más por la zona restringida que se había establecido en ambas fronteras por las maniobras militares que Rusia tení previsto desarrollar esos días. Con esos datos sobre la mesa, quedaba claro que se trataba de un vuelo de gran precisión para tratar de cruzar ese corredor y continuar por los paises bálticos.
El despegue al atardecer, con los alpes suizos de fondo, no pudo ser más espectacular, pero con la caida de la noche nos concentramos en las zonas de control que tendríamos que atravesar: Zurich, Munich, Praga... al amanecer siguiente habíamos quedado un poco retrasados a tener que cambiar de altura por requerimiento del ATC de Munich, pero esto lejos de ser un problema se mostró como una ventaja al final de vuelo. El equipo francés de Vincent Leys y Christophe Houver optó por una estrategia muy agresiva de volar muy alto y cruzar rapidamente el corredor hacia Lituania, cosa de consiguieron de forma magistral. El resto de equipos se fueron dirigiendo sin remedio hacia la zona restringida de Kaliningrado, teniendo que aterrizar antes de alcanzarla.
Durante el día siguiente tuvimos que hacer un ejercicio de paciente navegación hacia el este y sureste dentro de Chequia para ganar grados y, sobre todo, esperar a la entrada de un frente que empujaría los vientos en la dirección deseada. Fue solo el segundo día por a mediodía cuando pudimos iniciar el ascenso para hasta alcanzar una altitud de 4.000 metros que nos llevaban rapidamente en la dirección deseada, eso sí, acompañados del tiempo inestable que traía el frente. Tras varias horas de gran concentración para no perder la trayectoria perfecta, ya solo acompañados por el equipo suizo de Frieden-Whichpratiger, una nube de gran desarrollo que nos acompañaba puso fin al nuestro vuelo al empezar a generar rayos a poca distancia de nuestra posición, y tras recibir la llamada de nuestro meteorólogo Tomas Hora advirtiéndonos de ello, nos dispusimos a aterrizar a la mayor celeridad por lo que fuimos adelantados en resultado final por nuestros amigos suizos. Al final, my satisfechos por repetir un puesto en el podio que ya el año pasado nos parecía muy dificil de conseguir.
Han formado el equipo el piloto madrileño Anulfo González (Aerotours) y el catalán Angel Aguirre